Septiembre
Valdesuei, 45, Salamanca
Este septiembre llegó una nueva compañera.
Nuestras miradas conectaron y supe que era el inicio de algo maravilloso.
Enseguida llegaron las conversaciones infinitas, los besos y las caricias furtivas en el baño del vestíbulo.
Su piel era tan fina y delicada…
Al enterarse el director, llamó a nuestras familias amenazando con expulsarnos, pero nuestro amor era tan fuerte que planeamos fugarnos al día siguiente.
Ella, indómita y única, no me esperó.
Esa misma noche voló desde aquel oscuro geriátrico rumbo a la eternidad.
Nuestras miradas conectaron y supe que era el inicio de algo maravilloso.
Enseguida llegaron las conversaciones infinitas, los besos y las caricias furtivas en el baño del vestíbulo.
Su piel era tan fina y delicada…
Al enterarse el director, llamó a nuestras familias amenazando con expulsarnos, pero nuestro amor era tan fuerte que planeamos fugarnos al día siguiente.
Ella, indómita y única, no me esperó.
Esa misma noche voló desde aquel oscuro geriátrico rumbo a la eternidad.