El inicio de mi vida
Emerita, 46, Salamanca
Su abuelo le agarró fuertemente la mano y sus miradas se entrelazaron en un torbellino de cariño y emociones . En ese momento, los dos comprendieron que su amor uniría para siempre sus corazones y que volverían a reencontrarse cuando el destino, siempre caprichoso, lo creyera oportuno.
Y como si de un sueño se tratará, su alma voló muy alto, no sin antes acariciar su rostro con una brisa suave y cálida, envolviendo todo su cuerpo de una calma y serenidad la cual marcaría el inicio de su vida.
Y como si de un sueño se tratará, su alma voló muy alto, no sin antes acariciar su rostro con una brisa suave y cálida, envolviendo todo su cuerpo de una calma y serenidad la cual marcaría el inicio de su vida.