La Moira y la ventana
Lara Otero, 38, A Coruña
Un día más tras la ventana se reta a acertar el futuro. Imagina al repartidor aprovechando el pitillo antes de timbrar, a los gemelos chinchándose, al retriever mordiendo los cordones de alguna despistada y luego su mente, siempre más viva que su marchito cuerpo, recrea el flechazo de esta al increpar al dueño, una cita, una noticia en sucesos… ay, menos mal que aunque parezca una Moira lo suyo tiene mucho de aburrimiento y poco de tejer destinos. Así que se regocija con la colilla pisoteada, la infantil pedorreta, la dentellada del retriever, el grito al dueño, pero ¿están sonrojándose?