El encuentro
José Carlos vara mata, 42, Alcobendas

45 años, cansado de vender mentiras con sonrisa de anuncio, Marcos dejó Madrid, su traje y la oficina de cristal. En las Cíes aprendió a vivir del mar y a escuchar el silencio. Una mañana, descalzo en la arena, la vio: Laura, su primer amor, con el mismo brillo en los ojos y un libro de Saramago entre las manos. Se miraron largo, como si el tiempo hubiera sido solo espera. No hubo promesas, solo sonrisas y un paseo compartido. Desde entonces, marisquean juntos, cocinan al sol y se aman sin ruido, como quien sabe que ha llegado a casa.