La vida sin ti
LoretoMD, 31, Zamora

Le quemaba por dentro, porque fue en un amanecer como otro cualquiera cuando se marchó para siempre, marcando el inicio del resto de despertares de su vida sin ella a su lado. Insulsos y silenciosos, especialmente si el alba la encontraba en un lugar que le recordara a ella. Y, a no ser que empezara a explorar nuevas camas, todas en las que podía recalar las habían compartido juntas. Esa era su fortuna, y también su condena. Todo estaba contaminado por su presencia y, ahora, herido de muerte por el dolor asfixiante que le provocaba no poder volver a tenerla.