Yo tan flor y tú tan abeja
Pablo JR, 31, Rentería

Hace frío y, como flor, me encierro en mí mismo. Cierro los ojos, esperando que nadie me arranque de mi lugar. El invierno siempre se me hace largo, porque siempre estoy solo.
Cuando empiezo a sentir la luz de la primavera, mis malos pensamientos se atenúan. Tal vez pueda abrirme una vez más… Y ahí estás tú. Tan bello tu pelaje bicolor, tan alegre tu zumbido, tan atentos tus ojos con tan cariñosa mirada...
Me abro del todo, pues sé que no tengo nada que temer. Estamos juntos durante esta primavera y, si el destino quiere, nos volveremos a ver.