El apagón
José Luis, 79, Salamanca
Decidió salir a la calle antes de que las sombras se apoderaran de la ciudad.
Poco antes de la hora de comer, se fue la luz, el fuego de la cocina y la luz de los semáforos.
Tenía una cita, a la que no acudiría.
Se habían empeñado sus amigos, y por nada del mundo los defraudaría; pero maldita la gracia...
Cuando regresó a casa regresaron todas las cosas que se fueron acompañando a la "LUZ".
Por una vez el destino le había jugado una buena pasada.
Poco antes de la hora de comer, se fue la luz, el fuego de la cocina y la luz de los semáforos.
Tenía una cita, a la que no acudiría.
Se habían empeñado sus amigos, y por nada del mundo los defraudaría; pero maldita la gracia...
Cuando regresó a casa regresaron todas las cosas que se fueron acompañando a la "LUZ".
Por una vez el destino le había jugado una buena pasada.